Cuando las mujeres se comprometen a capacitarse para luego enseñarle a la comunidad, que hombres y mujeres pueden relacionarse con respeto y justicia; esas mujeres van construyendo una sociedad más justa; son Promotoras de Género.

Este es el caso de las mujeres integrantes de la Junta Directiva del CAPS de Las Pilas del municipio de Villanueva, Chinandega. Es un comité, en donde la mayoría de la Junta Directiva, son mujeres y conocer. Cada una de ellas, de una manera o de otra, han hecho el esfuerzo y sacado su tiempo para cumplir con su compromiso de capacitarse y de conocer de sus funciones. No han fallado a las capacitaciones organizadas por el SIMAS al igual que con ADEES (Asociación para el Desarrollo Eco-Sostenible) y Solidaridad Internacional (SI). Así van mejorando su desempeño.

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“Hemos ido a intercambios de experiencias hasta Masaya, Granada, Santa María de Pantasma, Somoto, la Concordia, San Rafael del Norte, Yalí, Salinas Grande y el último intercambio fue en Belén, Chinandega. Con las visitas hemos conocido otros sistemas de agua, hay sistemas que están bien organizados. Hemos recogido lo bueno de todas las experiencias y también aprendido de lo que no debemos hacer. Ahora siento que mejoro y me desenvuelvo con más seguridad.” complementa Flor de María Betanco Roque Tesorera del CAPS Las Pilas.

“Me viene a mis recuerdos, esa vez que a mí me eligieron, pero que no quería aceptar. Es que me sentía que no podía desenvolverme en ningún puesto como Junta Directiva. Por esto, estoy muy agradecida con todas estas organizacione que me han venido apoyando. He tenido muchas oportunidades de asistir a talleres, salir a otros lugares y he sentido que la comunidad me ha brindado confianza. Estuve asistiendo a la Escuela de Liderezas por casi un año en la Chinandega. Antes no tenía estos valores” expresa Flor de María Betanco Roque.

Cuando una mujer se valora a sí misma, comienza a superarse día a día. Empieza por organizarse, aceptar responsabilidades en la comunidad, mejora en lo personal y en la calidad de vida de su familia. La superación personal tiene su fuerza en el amor propio, en la autoestima.

Para Nidia Verónica Roque Centeno ejercer su función de fiscalizar cómo se va trabajando en el CAPS, consiste en identificar las precauciones sobre el sistema de agua, “en las Asambleas siempre estoy mencionando quién vino y quién no vino, el sentido de la asamblea es para reunirnos todas las personas para opinar y encontar alternativas de solución a los problemas en el servicio del agua” comenta Roque.

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“El cargo de Secretaria lo tengo desde hace poco que la asamblea me eligió. He apoyado al CAPS, desde hace 10 años. Ahorita tengo 25 años. Me toca hacer las actas, llevar los libros de registros, los recibos, las facturas. También apoyo en la rendición de cuenta, en el informe mensual que hacemos sobre los ingresos y los egresos. Antes era voluntaria, ahora me dan una ayuda 200 córdobas al mes, por el trabajo de leer los medidores y cobrar los recibos, la ayuda es por ese trabajo, no como directiva” agrega María del Socorro García Betanco.

Las mujeres que conforman esta Junta Directiva, manejan el perfil de funciones de cada cargo, María Auxiliadora Alvarado expone sus deberes como vocal: “Yo acompaño en las reuniones y asambleas, ayudo con las invitaciones, antes nosotros teníamos cada tres meses, pero con esto de la pandemia las hicimos a los seis meses Las casas son 256. Toman y se benefician del servicio 1,280 personas. En una de las asambleas vinieron 181 personas. Después la asistencia bajó a 40, que a 38, que a 50. Ahora pensamos hacer las asambleas separadas por sectores para evitar las grandes reuniones.

"En nuestra comunidad nos apoyan para las asambleas con propaganda en las escuelas, nos hemos auxiliados en maestros y en líderes de las iglesias evangélicas y católicas” expresa María Auxiliadora como elemento importante en la gestión comunitaria por el agua.