En el caso de las desigualdades de género, aunque sean reconocidas en nuestras leyes y se promuevan cambios por el estado y organizaciones. El comportamiento de la sociedad continúa estando fuertemente influenciado por un modelo cultural histórico que ha establecido diferencias sin fundamento, entre mujeres y hombres.
Esta teoría la confirma las expresiones realizadas, tanto por hombres y mujeres en diferentes reflexiones realizadas en las capacitaciones sobre brechas de Género, impartidas por el proyecto TGSRH en el cierre de capacitaciones en los municipios de Jicaral y Larreynaga, donde participaron un total de 9 CAPS (2 del municipio de Larreynaga y 7 en el Jicaral).
Para Ileana Barberena, Secretaria CAPS El Cambio, señala que “aún existe el patriarcado. Cuando el hombre trabaja, solo lleva la comida la casa (la canasta básica) y no les gusta que las mujeres administren la economía. Ellos nos visibilizan el aporte de la mujer en los quehaceres del hogar y esta, por su carga de trabajo, se limita a realizar otra labor que la lleve a ser independiente”.
Estas desigualdades afectan no sólo a las mujeres por menores oportunidades de trabajo, acceso a la educación o crecimiento laboral, sino también a la sociedad en general ya que este problema limita el crecimiento económico. Puesto que cuando a una mujer se le niega el derecho o la oportunidad a desarrollarse, no solo la limita a aportar únicamente al hogar. Ya que esta tiene un gran potencial en aportar en la educación, contribuir en la salud, cultura y economía de un País.
“Cuando se habla de igualdad de oportunidades, se refiere a justicia social, ya que todas las personas pueden tener las mismas posibilidades de acceso a algún bienestar social”, destaca Francisca Toruño, presidenta del CAPS Cristalito.
Finalizando con una frase motivacional para las mujeres del taller “Una mujer debe tener metas, aunque esa conlleve sacrificios. El reconocer y defender nuestros derechos es la clave del empoderamiento".
Despertamos para luchar por la igual de oportunidades
Cuando una mujer reconoce que el patrón de relaciones históricas (creencias), construcciones culturales aprendidas, que han dado lugar a una posición subordinada del sexo femenino hacia el masculino y que la ha ubicado en desventaja, ante cualquier oportunidad de desarrollo en la sociedad. Ese reconocimiento conlleva a disminuir la situación de subordinación encaminándola hacia el empoderamiento.
“Cuando a nosotras las mujeres nos educan con diferentes creencias. Sobre lo que podemos o no podemos hacer. Esa enseñanza equivoca nos limita a desarrollarnos. Tanto Hombres como mujeres tenemos igualdad de derecho y las mujeres podemos hacer y valemos mucho, comenta Corina Rugama, Secretaria del CAPS El Bordo.
Nemesio Rodríguez, Fiscal CAPS la Pita. Las mujeres han mejorado un poco en la defensa de sus derechos. Tanto los hombres como las mujeres podemos ejercer dominio. Ha habido un rescate sobre los derechos de la mujer. Hasta la Biblia te dice que se da una esposa, no una esclava. Cuando las mujeres comienzan a reconocer estas desigualdades. “Es el inicio de la aceptación de la igualdad entre hombres y mujeres”.
Importancia de los Talleres de Género
La información que nos brindaron, nos va a servir a nuestras comunidades ayudar en la promover la participación de la mujer y demostrarle que si podemos trabajar juntos hombres y mujeres y mejorar las diferentes situaciones que se presenten en el CAPS, expresa Ileana Barberena secretaria CAPS El Cambio.
La concientización que nos han hecho hoy para valorar, lo que tenemos a la par nuestra. Porque las mujeres trabajan el doble, realizan diversas funciones de mucho valor. Y esta reflexión deberíamos compartirla para eliminar ese conocimiento machista, destaca Manuel Sánchez, CAPS La Quebrada El Jicaral.
Las capacitaciones son realizadas en el marco del, proyecto Tecnología para la Gestión Sostenible del Recurso Hídrico (TGSRH), financiado por la Asociación cambio para los Niños y el Gobierno de CANADA.