La dependencia económica, el recelo de la pareja, la desconfianza del marido, las horas de trabajo en casa, la falta de estudios, entre otras, son las situaciones que enfrentan las mujeres del campo y que frenan el cumplimiento de su derecho humano: la equidad de género.

Así lo expresan mujeres líderes de juntas directivas de 12 CAPS, durante el Segundo Encuentro Virtual, promovido por el SIMAS, que contó con participación de 23 personas, 21 mujeres y dos hombres. 4 de los CAPS que participaron son del departamento de Chinandega y 8 del departamento de león.

El segundo encuentro virtual se realizó el jueves 19 de noviembre con el propósito de juntar a las mujeres líderes de CAPS y reflexionar sobre aquellos obstáculos que frenan la participación de las mujeres en el ámbito personal, familiar y profesional. El evento se realizó utilizando la plataforma Zoom, donde mujeres representantes de los comités se conectaron, (durante la nota no se darán a conocer nombres de cada participante de la sesión por privacidad de la actividad) haciendo uso de los dispositivos móviles que se enlazaron a la conversación que duró hora y 30 minutos.

Brenda Alaniz, responsable de género del proyecto Tecnología para la Gestión Sostenible del Recurso Hídrico, expresó que “las brechas de género son las desigualdades, en todos los niveles de la sociedad, que desvalora, impide y no acepta, el trabajo y aporte de las mujeres. Explicó, por ejemplo, que el 16% de las mujeres tiene menos acceso laboral que los hombres y que solo uno de cada cuatro puestos directivos, está ocupado por una mujer”.

La representante de uno de los CAPS del municipio de Chinandega expresó, “uno de los principales obstáculos que he vivido como mujer, es la dependencia económica de un hombre, porque tienes que andar pidiendo permiso para poder ayudar a tu comunidad, otro obstáculo que yo viví, fue el celo de mí pareja al ver que la comunidad me reconocía más a mí como una líder y él se sentía desplazado”.

El espacio virtual dio lugar a que mujeres de diversos lugares de occidente, expresaran pensamientos, y necesidades, tal fue el caso de la representante del uno de los CAPS de Chichigalpa, quien hizo referencia a eventos de su comunidad, “A los hombres le cuesta aceptar el liderazgo de las mujeres y eso resulta en comentarios destructivos para nosotras, incluso en mí trabajo no ha sido tan fácil porque los hombres no creen en mí, dicen que las mujeres no podemos usar armas y que seguro yo solo llego a dormir”.

A medida que las mujeres daban a conocer sus situaciones de vida, otra representante del municipio de León comentó,  “Mí obstáculo más grande ha sido el rol doméstico por que las tareas de la casa se tienen que seguir haciendo, entonces se convierte en una responsabilidad grande”.

Parte de las conclusiones a las que el  grupo llegó, indican que, aunque las mujeres estén luchando y se encuentren al frente de las juntas directivas, es necesario que también los hombres se involucren, porque consideran que en la comunidad y en la sociedad, la responsabilidad es compartida.

Este ciclo de encuentro virtuales forma parte del proceso de capacitación y reflexión sobre las brechas género que se estará realizando a partir del mes de diciembre con las Juntas Directivas de 323 CAPS en donde coordina acciones el SIMAS, en el Occidente de Nicaragua.