“A mí siempre me ha gustado trabajar para la comunidad y soy del pensamiento, que si trabajo para la comunidad, el beneficio es para todas las personas. Cuatro años atrás, aquí no había un CAPS (Comité de Agua potable y Saneamiento) formado legalmente, hasta que se perforó el pozo para la comunidad, se necesitó formar uno...”.
Aunque con sus temores, Socorro Eriberta García Morales, Técnica en computación y Tesorera del CAPS Calle Real, Posoltega, aceptó el cargo, estos casos son pocos comunes; según la guía “Acortar las brechas de género en la gestión comunitaria del agua”. Esta publicación analiza, que sobre las posiciones de poder en los cargos de las juntas directivas. Al revisar la participación de las mujeres, ellas ya están asumiendo cargos, sólo que sus funciones, se limitan a levantar actas en las reuniones, convocatorias, registros de datos y otras tareas consideradas de menor importancia, que no requieren hablar en público y conllevan menos responsabilidades a la hora de tomar decisiones. Mientras el cargo de presidente y de tesorería son ocupados por hombres.
“Yo no tenía ningún conocimiento de las funciones, ni de contabilidad, pero desde que formamos el Comité, nos propusimos completar el sistema con el tanque y su torre. A mi me ha servido de mucho relacionarme con la alcaldía para las gestiones. Ahora que logramos el finaciamiento con el tanque y su torre, estamos mejor. Por lo menos tenemos unas 4 hora de servicio de agua todos los días a 92 usuarios, que representan a 500 personas según el censo”.
Para este completamiento, la comunidad Calle Real aportó el trabajo de 300 metros de zanjeo para la tubería de conducción y de la red de distribución. A cada usuaria y usuario se le asignaron 4 metros (C$200.00) cumplidos por iguales sin problemas. En estas mejoras: SIMAS aportó $18,498 dólares, Alcaldía $800 dólares y la comunidad aportó para la compra de tuberías, llaves y demás $1,559.00, sumado un total de $28,857.00 dólares.
“Estoy clara que para ejercer mi cargo, debo tomar tiempo de donde sea para el trabajo voluntario, sin esperar nada a cambio. Ese tiempo lo saco porque trabajo con mi mamá en el destace de cerdos, hacemos cosa de horno y cultivamos unas tierritas para sembrar maíz, yuca, sorgo y arroz.
Como Tesorera sigo aprendiendo de las capacitaciones con el UMAS (Unidad Municipal de Agua y Saneamiento) en conjunto con el SIMAS (Servicio de Información Mesoamericano sobre Agricultura Sostenible), sé un poco más sobre el manejo del equipo de bombeo con su sarta y de administración. Así para rendir cuentas claras, hemos establecido que cada 15 días nos cuadramos, calculamos los ingresos y engresos, más la mora y al momento de dar cuentas es más fácil trabajar cifras, facturas y recibos.
Como no hay agua las 24 horas, nuestro propósito es ampliar la capacidad con un depósito de agua mayor. El número de personas usuarias ha aumentado y el agua está limitada porque pagamos en promedio C$ 13,000.00 Córdobas por consumo de energía. Cuando nos cuadramos después del primer mes, analizabamos que la mora bajó de C$ 7,000.00 a C$ 1,800.00 Córdobas, gracias a que el agua llega todos los días a una hora fija.
Me encantaría disponer de una oficina para manejar aparte estos asuntos del agua. Fíjese que al disponer de internet y el WhatsApp, me ha ayudado bastante en las gestiones con la alcaldía, nos pasamos información con otros CAPS, si necesito hacer mantenimiento a la bomba, pregunto y me contestan de cómo se pueden hacer las cosas más rápido...”.