Nicaragua posee una riqueza en sus recursos naturales principalmente el recurso agua. Sin embargo, gran parte del sector rural presenta limitantes en el acceso de este vital líquido y en otras zonas poseen afectaciones por la calidad de agua, incluso se reconoce algunos casos que se deben a causa de hábitos inadecuados.
Agua Sana
El agua para consumo humano no debe contener ningún microorganismo del que se sepa que es patógeno, ni bacteria alguna, indicativa de presencia de coliformes fecales. Para asegurarse que un abastecimiento de agua está libre de patógenos es necesario realizar muestras de forma trimestral o semestral.
El tratamiento del agua por cloración permite eliminar de forma sencilla y poco costosa la mayor parte de los microbios, bacterias, virus y gérmenes (hongos) responsables de enfermedades como la diarrea, disentería, enfermedades nasos faríngeos, fiebres tifoideas y el cólera.
Una de las formas más sencillas de garantizar la calidad del agua de beber, es usar cloro ya sea en líquido, granulado o en pastillas, utilizando un dosificador con un clorador de PVC.
Una de las acciones que desarrolla SIMAS, en el presente mes para garantizar agua de calidad y la conservación de la salud humana a través del Proyecto Tecnología para la Gestión Sostenible del Recurso Hídrico (TGRH), es la entrega de cloro granulado y pastillas para 20 CAPS y comunidades del municipio de El Sauce. Para el próximo mes, se pretende ampliar la dotación de clorinadores, cloro líquido y granulado en 11 municipios del Pacifico de Nicaragua. Con el fin de que las familias beneficiarias de estos sistemas de agua en el sector rural, tengan en agua de calidad. Siendo esta una acción propicia en este contexto de Pandemia mundial; donde garantizar la higiene, salud y vida de los pobladores es una prioridad para alcanzar el Derecho humano al Agua.
Algunas recomendaciones para adecuada cloración
Protección Prolongada
Cuando la desinfección del agua con cloro se realiza correctamente, el cloro residual se queda en el agua, protegiéndolo de una nueva contaminación. La desinfección del agua para consumo, en tanques de almacenamiento se debe de realizar de forma mensual. Es un proceso que requiere de mucho cuidado para que la dósis del desinfectante garantice agua segura.
Cloración en MABE
La cloración en Mini acueductos por Bombeo Eléctrico (MABE) con el sistema de inyectores se debe hacerse con Hipoclorito de Sodio en líquido al 5% como el que entrega el MINSA; igual a la concentración del Cloro marca Magia Blanca.
Este se utiliza, mediante un clorinador, conectado desde la sarta al tanque para hacer llegar por la red de distribución hacia las viviendas y garantizar la sanidad de las familias comunitarias. Y este se sugiere realizar de forma permanente. Pues los clorinadores van directo a la red de distribución.
Cloración en MAG y MABE
Para la cloración de Miniacueductos por Gravedad (MAG) y MABE. Cuando se utiliza hipoclorito de calcio en polvo solo se debe usar disolviendo y revolviendo bien en un recipiente para utilizar en lavado de tanque y red de distribución. Ya que si este se utiliza de forma directa sin disolver previamente, puede taponear la red de distribución.
Para desinfectar el agua se averigua la concentración del cloro que se va a utilizar para preparar una dosis adecuada de la mezcla.
Cuando se utiliza cloro en polvo las dosis que se pueden utilizar depende de la cantidad de agua que vamos a tratar.
Para la desinfección del tanque de Almacenamiento y red de distribución. Ya sea para tanques de almacenamiento de Mini acueductos por gravedad o Mini acueductos por bombeo eléctrico. Se puede usar el hipoclorito de calcio al 65 a 70% granulado utilizando dosis de 2 kilos por metros cúbico de agua. Se debe diluir el polvo, agregando poco a poco 20 litros de agua (un bidón), revolviendo bien, hasta quede disuelto. Y luego se le aplica dentro del tanque.
Para esta actividad se deben tener las siguientes precauciones.
- El Operador debe usar mascarillas de protección para hacer la solución
- Se recomienda avisar a la población usuaria una vez realizada la cloración al tanque para no utilizar el agua como máximo 24 horas. Ya que se debe dejar de 8 a 12 horas en el tanque y de 8 a 12 horas en la red de distribución.
- Una vez pasado este tiempo se deben abrir las llaves de las tomas domiciliares para dejar salir el agua y cuando se termina el olor a cloro, cerrarla. Recomienda el Ing. Fabio Vilchez – Especialista en sistemas de agua.