Es interesante revisar que en los resultados 2017, solo las mujeres organizadas en Comités de Agua Potable y Saneamiento (CAPS) declararon utilizar TIC (Tecnología para la Información y Comunicación) para promover el derecho al agua, representando el 40% de las directivas de los CAPS; información que corresponde a parte de los resultados encontrados en la línea base levantada por el Servicio de Información Mesoamericana sobre Agricultura Sostenible, SIMAS, para la ejecución del proyecto Tecnología para la Gestión Sostenible del Recurso Hídrico, TGSRH.
Solo el 1% de la población encuestada ha declarado utilizar TIC para participar en procesos democráticos de toma de decisiones y solo el 47% de la población entrevistada declaró tener acceso a TIC. Esto trae como conclusión que las juntas directivas de los CAPS recurrían a las TIC para comunicarse y hacer gestiones con las autoridades locales.
Según estudios del Banco Mundial, la brecha digital frena a América Latina y el Caribe, pero que además, la crisis provocada por la COVID-19 ha afectado con fuerza y ha puesto en primer plano la necesidad de una recuperación resiliente e inclusiva. Un mayor acceso digital, en apoyo de la educación a distancia, las transferencias de efectivo digitales, la telemedicina y los servicios públicos en línea, es la piedra angular de esta agenda y requiere políticas ambiciosas y un programa de regulaciones, así como mayores inversiones en infraestructura.
Ante esta situación, uno de los objetivos medulares del proyecto TGSRH es lograr un mejor uso de la ciencia y la tecnología por parte de las poblaciones rurales del noroeste de Nicaragua para fomentar su participación en procesos democráticos de toma de decisión en la gobernanza del agua.
Los argumentos a favor del acceso digital son claros, agrega en el blog del Banco Mundial Franz Drees-Gross, Director de Infrastructura, América Latina y el Caribe:
“La digitalización impulsa la inclusión social y financiera, así como los resultados en materia de aprendizaje y salud. Actualmente, casi la mitad de la población adulta de la región no maneja una cuenta bancaria. Unos 170 millones de estudiantes en toda la región se vieron afectados por el cierre de escuelas durante la pandemia. Un 71% de los países experimentó interrupciones en la prestación de atención para enfermedades durante los primeros meses de la crisis provocada por la COVID-19".
Los desafíos para revertir esta situación son enormes: la cobertura deficiente y desigual, los altos costos de los datos y de los dispositivos, continúan obstaculizando el acceso digital.
En la actualidad, menos de la mitad de la población de América Latina y el Caribe tiene conectividad de banda ancha fija y solo el 9.9% cuenta con fibra de alta calidad en el hogar. Si bien el 87% de la población vive dentro del alcance de una señal de 4G, el uso y la penetración reales siguen siendo bajos con un 37%. Solo 4 de cada 10 latinoamericanos de zonas rurales tienen opciones de conectividad en comparación con el 71 % de la población de zonas urbanas.
Los planes de datos y los dispositivos con Internet no son asequibles para las personas pobres de la región. En promedio, el costo de un plan de datos de solo 1GB representa el 2.7% del ingreso familiar mensual. Además, el costo del teléfono inteligente básico más barato disponible representa entre el 4 % y el 12 % del ingreso familiar promedio en gran parte de la región, y entre el 31 % y el 34 % en Guatemala y Nicaragua o incluso el 84 % en Haití...”.
El proyecto TGSRH al suministrar una Tablet con un plan de datos a 368 CAPS (1,864 personas en juntas directivas) asentados en 13 municipos (40, 000 familias beneficiadas), al recibir capacitaciones y ser nominados a mejoras inversiones en su sistema de servicio de agua, han estimulado y promovido el uso de la ciencia y la tecnología en sus gestiones comunitarias, especialmente las mujeres y los grupos marginados, en departamentos de Chinandega y León. De igual manera, al acortar la brecha digital, ha fortalecido los vínculos comunicacionales en sus municipalidades y entre el gremio CAPS, así como en su aspecto organizacional.